martes, 23 de noviembre de 2010

Inútil.

-Pensaba que era el amor de mi vida...
-Bueno, ¿como todos los críos no?
- No. Como todo el mundo. El primer amor y el último
se sienten igual, eso es lo que se tarda en entender.
- ¿Y cuándo te diste cuenta tú?
- Pues cuando dejé de rascarme. Llega un día en que te das cuenta que en esa pareja solo quedas tu, y que lo único que te ata a él es esa herida y haciéndola sangrar no mantienes vivo su recuerdo, sino el dolor de la perdida...

1 comentario:

  1. Y si la misma relación, ese gran amor era la misma herida que no dejaba de sangrar?
    Muchas veces no nos percatamos que nuestro propio yugo, es nuestros sentimientos, que nos engañan.

    Excelente blog...me uno!!

    www.aullidodepena.blogspot.com

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